El Tribunal Criminal N°2 de San Nicolás, por intermedio del juez Alejandro López, resolvió no admitir el juicio abreviado que en su momento de las partes habían acordado y ahora todo se resolverá por medio de un juicio por jurados.
Por el asesinato de Abelardo Vallejos hay cinco personas procesadas y que son las que se expondrán ante el jurado compuesto por 12 vecinos en fecha a confirmar.
En su presentación el doctor López sostuvo:
“Todo este panorama impide que un hecho para el cual se ha hecho la contundente manifestación de que los acusados obraron “con distribución clara de roles y dominio funcional derecho mediando pago o promesa remuneratoria” culmine con la declaración de que todos han formado parte de una arritmia o agresión por la sola conveniencia de la salida alternativa al juicio oral”.
“Ello es un obstáculo que me impide avanzar en esta etapa aún con la conformidad prestada por los imputados por entender que el acuerdo presentado para su homologación es inadmisible. Estas discrepancias me llevan indefectiblemente a continuar con la única opción legal prevista, que es la de ventilar los hechos traídos a juicio en el marco de un juicio por jurados, tal como optaron los imputados oportunamente”.
“Resuelvo no admitir el juicio abreviado, cuyo acuerdo fue alcanzado por las partes en la audiencia celebrada, por discrepancia insalvable entre la descripción táctica y la calificación legal, continuando los presentes autos bajo el trámite de juicio por jurado”.
El asesinato de vallejos se produjo el 14 de mayo del 2022 en una vivienda de Molina y Gardel, en el barrio Villa Igoillo, y los acusados son Ricardo "Ricky" Ontivero, un vecino de 47 años conocido en el barrio, ex boxeador y panadero, a quien se lo señala como supuesto instigador. Juan Juárez de 43 años, Matías Tahiel de 24, Carlos Martínez de 60, y Jesús Montaldi de 27.
Vallejos murió en el acto luego de ser atacado por estas personas quienes portaban distintos elementos con el que lo golpearon y le aplicaron un profundo corte en la cara que le terminó causando una lesión arterial irreversible. El objetivo era el de recuperar la propiedad que ocupaba la víctima.
Foto: El Norte