Una secuencia de robos y asaltos cometidos a lo largo del 2021 tuvieron en vilo a varias familias de Pueblo Doyle.
Uno de los hechos más resonantes fue el cometido en la propiedad de la familia Oneto, quien fue asaltada por una banda armada el 21 de abril de ese mismo año.
Por aquel episodio fueron varias las personas sospechadas de haber participado en el hecho pero con el correr de la instrucción a cargo del fiscal Hernán Granda fueron quedando al margen hasta llegar a la definición con un solo imputado. La presunta autoría recayó sobre una persona identificada como Paolo Gonzalo Barrios, un empleado municipal de 41 años domiciliado en Santa Lucía.
La defensa del acusado, a cargo del Estudio Lima, aportó las pruebas necesarias y bajo la figura del juicio abreviado logró convencer al Tribunal de que el sospechoso no había tenido nada que ver.
Los testimonios y los datos reunidos durante la instrucción no alcanzaron y la jueza María Belén Ocariz resolvió absolver a Paolo Barrios quien así quedó al margen de toda acusación.
El hecho en cuestión se originó alrededor de las 20 horas sobre la propiedad ubicada en Cristóbal Doyle 556 y fueron al menos cuatro las personas que sorprendieron a la familia Oneto.
Los delincuentes maniataron a las víctimas y se llevaron distintas pertenencias y elementos de valor.
Días después hubo allanamientos y distintas actuaciones pero nunca se pudo dar con los elementos robados y menos contar con las pruebas necesarias para dar con los verdaderos autores del hecho.