
Pasan los días y la permanencia de Maximiliano Cabaleyro en la Unidad Penal 3 de San Nicolás se hace cada vez más difícil.
El dirigente del sindicato de Camioneros permanece detenido allí desde hace varios meses luego de que fuera denunciado por los representantes de la firma Rey distribución de nuestra ciudad por presuntos actos de aprietes y extorsión que fueron avalados por la justicia que actuó con contundencia y mandó a la cárcel a los máximos responsables del gremio en la región, ya que además de Cabaleyro también está detenido el dirigente sampedrino Fernando Espindola a usado del mismo delito.
Ahora las autoridades penitenciarias resolvieron trasladar de pabellón a Cabaleyro debido a que en los últimos días tuvo varios inconvenientes con presos oriundos de San Pedro y San Nicolás quiénes le recriminaron que él ahí era uno más y que no tenía el poder que creía mantener como cuando dirigía el gremio en libertad. Es más, lo culpan de haber sido el generador de varias riñas que se dieron en estás semanas.
Claramente Cabaleyro ya perdió el liderazgo que supo tener y ahora deberá acomodarse a los códigos tumberos y la convivencia que exigen estos tipos de lugares.