
La inseguridad en los campos aumenta día a día y una vez más una familia que vive sobre el kilómetro 166 de la Ruta 9 fue víctima de un hecho que en definitiva no llegó a concretarse pero porque los damnificados sostienen que regresaron cuando los delincuentes todavía estaban en el interior del lugar.
Fue el viernes cuando los propietarios de la casa había salido y al regresar, cerca de las 22 horas se encontraron con la tranquera quebrada al medio y los 4 caballos de la familia afuera del corral.
Al arribar advirtieron que algo estaba mal porque los perros estaban adelante de la casa y pudieron observar que dos caballos estaban sueltos en el parque y otros dos se encontraban en el campo de soja.
Las propias victimas advirtieron que los malvivientes aun permanecían en el predio porque en un determinado momento comenzaron a sentir el típico olor a marihuana, es decir que estaban cerca.
También recordaron que hace poco más de un mes les robaron unas ovejas y les abrieron todas las canillas del parque que en cuestión de minutos quedó totalmente inundado.